No sé ustedes, pero mis mascotas tienen llagas al menos una vez por semana. Principalmente algunos rasguños aquí y allá, pero en general necesita su atención.
Recientemente experimentamos el siguiente nivel en el tratamiento de lesiones.
Nuestra hembra Dogo Argentino de 4 años se cortó por completo los ligamentos cruzados de la rodilla. También pensó que sería divertido volver a hacerlo en la otra rodilla tres meses después.
A esta temprana edad, si puede tratar la lesión y pagar por ella, valdrá la pena, para usted y para su querido amigo de cuatro patas.
Tenga cuidado, sin embargo, el cuidado postoperatorio, las citas y la rehabilitación representan una cantidad considerable de tiempo y recursos. Debes estar presente en cada paso del proceso.
La situación se complica nada más recoger a tu perro en la clínica, tras una cirugía de dos horas.
Tu perro inevitablemente cojea, los medicamentos y la anestesia lo dejan inconsciente, lo lavan con una solución desinfectante, preferiblemente rosa, y usa el cono de la vergüenza.
En este punto, empiezas a dudar de que sea una buena idea, y empiezas a ver la montaña de obstáculos por delante.
El cirujano ha hecho su trabajo, pero todo depende de ti.
Asegúrese de que su perro no se lama la herida, mantenga los puntos donde se supone que deben estar, corra, salte, juegue o interactúe con otra alma durante unos 12 días.
Debe descansar y moverse lo menos posible, limitándose a defecar frente a la puerta, de 5 a 10 minutos al día como máximo.
Y luego quitamos los puntos. ¿Crees que ya está hecho? Todavía tienes 4-6 semanas por delante, durante las cuales tu perro solo puede caminar unos minutos, con correa, y... bueno... eso es todo.
Cuando crees que la parte más difícil ya está hecha, porque el veterinario acaba de confirmar con una tomografía computarizada que el hueso está curado, necesitas ponerte manos a la obra.
Es probable que su perro haya perdido la mitad o más de su masa muscular por estar todo el día acostado en la cama y solo salir a orinar. ¡Ambos necesitan comenzar a hacer ejercicio nuevamente!
Como opción, también puede consultar a un fisioterapeuta veterinario. Créeme, también me pareció gracioso la primera vez. Pero, lo creas o no, definitivamente valió la pena el tiempo y el dinero que gastamos en él, porque lograron en cinco citas lo que habíamos estado tratando de hacer durante meses.
Nuestro perro vuelve a estar en plena forma, corriendo, jugando y siguiéndonos a todas partes. Tiene placas de metal en las piernas, pero ya se olvidó de lo difícil que fue. No hemos olvidado.
29 de octubre de 2020 – Luna después de una TPLO (osteotomía de nivelación de la meseta tibial)
Volviendo al cono de la vergüenza, nuestra larga y desafortunada experiencia nos llevó a descubrir el collarín hinchable .
La recomendamos mucho. Permite que su perro se mueva libremente, no se golpea la cabeza contra los muebles y aún puede comer y beber mientras lo usa.
¡Solo ten cuidado si tu perro es, como el mío, muy flexible!
¡Hasta la próxima en El Arca de las Mascotas!
La familia del arca de mascotas